top of page

Movimiento intuitivo, ejercicio que respeta tu cuerpo

Foto del escritor: Claret MéndezClaret Méndez

Al igual que en la alimentación intuitiva, en la que escuchas las señales de tu cuerpo para decidir cuándo y qué comer, el movimiento intuitivo se basa en elegir actividades físicas que se sientan bien para ti, en lugar de seguir una rutina rígida o perseguir un ideal externo. Es una forma de conectar con tu cuerpo, respetando su energía y necesidades, y de moverlo de una manera que no se sienta violenta.


Muchas veces, el ejercicio se asocia con metas como perder peso, “tonificar” el cuerpo o cumplir con un estándar de actividad física, lo que puede generar estrés y desmotivación. El movimiento intuitivo nos invita a replantear esta relación. En lugar de forzarnos a realizar una rutina fija, nos abre la puerta a preguntarnos ¿qué actividad disfruto realmente?, ¿cómo me siento hoy?, ¿de qué manera puedo moverme que respeta mi estado físico y emocional?


No todos los días te sentirás con la misma energía o disposición. Habrá momentos en los que tengas la energía para hacer algo dinámico como bailar, correr o levantar pesas, y otros en los que prefieres caminar despacio, estirarte, hacer yoga suave o incluso descansar. El movimiento intuitivo te permite honrar esos ciclos y confiar en que tu cuerpo sabe lo que necesita. No se trata de seguir reglas externas, sino de moverte por placer, buscando el bienestar, no solo físico, sino también mental.


Reconectando con el placer de moverte

Uno de los beneficios más importantes del movimiento intuitivo es que ayuda a reconectar con el placer de moverte. En lugar de ver el ejercicio como una tarea o una obligación, lo experimenta como una forma de autocuidado. El movimiento deja de ser una fuente de presión y se convierte en una oportunidad para disfrutar, soltar el estrés y sentirte bien. Puedes disfrutarlo por el simple hecho de cómo te hace sentir: más relajado, más fuerte o más en sintonía contigo


Además, cuando te liberas de la idea de que el ejercicio es "todo o nada" (o sea, que solo cuenta si haces una rutina larga y estructurada), descubres que cada movimiento, por pequeño que sea, tiene valor. Caminar al aire libre, subir las escaleras en lugar del ascensor, estirarte unos minutos mientras trabajas... todo cuenta.


El equilibrio entre cuerpo y mente

Moverte de forma intuitiva también tiene un impacto positivo en tu mente. Te enseña a escuchar lo que necesitas en lugar de forzar actividades que no disfrutas o que no te hacen sentir bien. Y cuando te escuchas, es más fácil encontrar un equilibrio entre actividad y descanso.


No es necesario que sigas entrenamientos intensos todos los días para estar saludable. A veces, un paseo tranquilo o una sesión de estiramientos puede ser justo lo que necesitas para estar bien.


Ejercicio sin estrés, resultados reales

Cuando te mueves de manera respetuosa y constante, es más probable que disfrutes del proceso, lo que te motivará a ser más activo. Los beneficios físicos, como el fortalecimiento muscular, la mejora en la flexibilidad y el aumento de energía son una respuesta a ese hábito.


Cada cuerpo es único, y lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra. Por eso, en el movimiento intuitivo no hay una fórmula secreta o una rutina ideal. La clave está en explorar, probar diferentes actividades y descubrir qué es lo que realmente te hace sentir bien.


Si estás buscando una manera de incorporar el ejercicio a tu vida sin las presiones habituales, el movimiento intuitivo puede ayudarte a sentirte más libre, en equilibrio y en sintonía con tu cuerpo. Así que, la próxima vez que pienses en moverte, pregúntate: “¿qué necesita mi cuerpo hoy?” y disfruta el proceso de redescubrir el placer de moverte. Yo te puedo ayudar :) ¡agendemos una cita!




Comments

Rated 0 out of 5 stars.
No ratings yet

Add a rating
bottom of page